Las maravillas de la naturaleza siempre han estado ahí, pero su descubrimiento de la mano del hombre, en muchos casos, es bien reciente, es el caso del El Salto Angel.
El salto Ángel, o “Kerepakupai Vena” que significa “salto del lugar más profundo” en la lengua pemón una de las familias lingüísticas más importantes de América del Sur, es un espacio natural protegido, establecido como parque nacional el 12 de junio de 1962, y declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1994. Este se extiende sobre un área de más de 30.000 km² (similar a la extensión territorial de Bélgica), hasta las fronteras con Guyana y Brasil y por su tamaño es uno de los más extensos del mundo, con una altura de 979 m (807 m de caída ininterrumpida), generada desde el Auyantepuy. Se localiza en el Parque Nacional Canaima, en el estado Bolívar, Venezuela.
En el año 2009 fue nominada para concursar en las Siete maravillas naturales del mundo, siendo la tercera de 77 maravillas más votada en el mundo entero. Esta imponente maravilla natural debe su nombre al aviador norteamericano Jimmy Ángel, que en el año 1937 quedó maravillado al sobrevolar sobre ella, y dio a conocer la existencia de la caída. En el año 2009 fue nominada para concursar en las Siete maravillas naturales del mundo, siendo la tercera de 77 maravillas más votada en el mundo entero.
Salto Ángel patrimonio cultural
Este salto es una de las mayores atracciones turísticas de Venezuela, sin embargo, visitarla resulta complicado, lo que no impide a muchos turistas de todo el mundo llegar hasta ella y disfrutar de toda las maravillas que se encuentra en este paisaje natural. Lo intrincado es llegar hasta las cataratas, debido a que la zona donde se encuentra está rodeada de bosque, la única manera de acceder es mediante un vuelo en avioneta desde la capital del país o desde Ciudad Bolívar, para llegar a un campamento conocido como Canaima.
Un dato imposible de pasar por alto, es que ésta catarata fue la inspiración para la ficticia selva de la película de Pixar «Up«, donde el protagonista intenta llevar su casa hasta la cumbre de las «Cataratas Paraíso», en clara alusión al Salto Ángel. El primer ser humano a llegar al río que alimenta las cataratas fue el explorador letón Aleksandrs Laime, también conocido como Alejandro Laime por los nativos de la tribu Pemón, éste hizo la ascensión del Auyan-tepui en 1955.
Dio al río el nombre de uno de los más hermosos ríos de Letonia, el Gauja. Si bien el nombre indígena de las caídas ya rara vez se utiliza, el nombre pemón del río, Kerep, sigue siendo ampliamente utilizado. Laime también fue el primer occidental en recorrer un sendero que conduce desde el río Churun a la base de las cataratas. En el camino, hay un punto de vista comúnmente utilizados para capturar las caídas en las fotografías. Es llamado «Mirador Laime» en su honor. Este camino es utilizado ahora por la mayoría de los turistas desde el campamento de Isla Ratón. La altura de las cataratas se determinó por una investigación de la National Geographic Society llevada a cabo por el periodista Ruth Robertson en 1949.
El éxito de la primera subida hasta el Auyantepui de cara a la parte superior de las cataratas, se relata en un libro de Lucas Dickinson, “Cuatro ángeles”. No cabe duda que el “Salto Ángel” es una de las mayores atracciones turísticas de Venezuela. Es un lugar privilegiado para los que buscan la aventura, ya que la catarata se encuentra aislada en una región selvática y el punto de partida para los viajes es el río base de las cataratas.
Imponente vista de las cataratas, desde Las Curiaras
Los viajes al Salto Ángel tienen lugar de junio a diciembre, cuando los ríos tienen la profundidad suficiente para los curiaras de madera utilizados por los indígenas pemón. Durante la estación seca (de diciembre a marzo) hay menos agua de las que se ve en algunas fotos. Aunque el Salto no puede ser visto en días nublados, y los visitantes no tienen ninguna garantía de verlas. Hay varias maneras de visitar al Salto Ángel, pero todas ellas comienzan en la laguna Canaima.
El salto Ángel también es conocido erróneamente como Churún-Merú.
Generalmente se cae en el error de llamar “Churún-Merú”, al Salto Ángel. Este nombre corresponde en realidad a otra catarata que se encuentra en el mismo Tepuy y mide alrededor de 400 m de altura. En Canaima, Santa Elena de Uairén y Ciudad Bolívar hay operadores turísticos que realizan excursiones por tierra, agua y aire (en avioneta o helicóptero) para divisar el Auyantepuy y sus numerosos saltos de agua. Las excursiones por tierra y agua se realizan desde el campamento Canaima y duran unas 13 horas. Los imponentes 979 metros del Salto Ángel cautivan al planeta entero. Y la belleza de esta larguísima caída de agua destaca entre otros monumentos naturales del mundo
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Se observa la imponente cascada en Canaima
Además del Salto del Ángel, hay otras cascadas a las que es posible aproximarse en una lancha o acceder bajo su cortina de agua: el Hacha, el Sapo, Ucaima. Hacer un recorrido en todoterreno por Canaima, que incluya caminatas por la frondosa selva para llegar hasta sus impetuosas corrientes de espuma, y darse un baño en sus playas de rojizas aguas, es un placer de los dioses.