Marrakech, apodada la “Perla del Sur”, es una de las ciudades más fascinantes de Marruecos. Ubicada al pie de las montañas del Atlas, Marrakech es un oasis en el corazón del desierto, donde la historia, la cultura y la tradición se mezclan para crear una atmósfera única y cautivadora. Fundada en el siglo XI por los almorávides*.
Marrakech fue durante siglos un importante centro político, económico y cultural de Marruecos. Hoy en día, la ciudad atrae a millones de visitantes de todo el mundo con sus magníficos palacios, exuberantes jardines, bulliciosos zocos y un ambiente vibrante. En este artículo te invitamos a descubrir los principales atractivos de Marrakech, así como las actividades imprescindibles a realizar durante tu visita a esta mágica ciudad.
*Los almorávides fueron una dinastía bereber que gobernó gran parte del norte de África y España en los siglos XI y XII. Fundada por Abdallah ibn Yasin, esta dinastía estableció Marrakech como su capital en 1062, convirtiéndola en un importante centro político, económico y cultural de la región. Los almorávides también desempeñaron un papel crucial en la expansión del Islam en la región, además de construir numerosas mezquitas, palacios y fortificaciones en todo su imperio. Fueron reemplazados por los almohades en el siglo XII.
¿QUÉ VER EN MARRAKECH ?
Cascada de Ouzoud :
Las Cascadas de Ouzoud, situadas a unos 150 kilómetros de Marrakech, ofrecen un refrescante escape del bullicio de la ciudad. Rodeadas de naturaleza, estas impresionantes cascadas caen desde una altura de unos 110 metros, formando piscinas naturales en las que poder nadar. También podrás admirar la fauna local, en particular los monos gusanos que habitan la región.
Plaza Jemaa el-Fna :
La plaza Jemaa el-Fna es el corazón palpitante de Marrakech, un lugar donde la historia, la cultura y el comercio se entrelazan. De día o de noche, esta bulliciosa plaza está llena de encantadores de serpientes, músicos, bailarines, malabaristas y comerciantes que venden una infinita variedad de productos locales, como especias, alfombras, ropa y joyas. Los cafés y restaurantes que rodean la plaza ofrecen la vista perfecta para observar toda esta actividad mientras disfrutas de un delicioso té a la menta.
Jardín Majorelle :
Los Jardines Majorelle, antiguamente propiedad del pintor francés Jacques Majorelle, son un verdadero oasis de tranquilidad en el corazón de Marrakech. Los jardines albergan una increíble colección de plantas exóticas, cactus y palmeras, además de una villa Art Déco y un museo bereber. El color azul de los edificios crea un llamativo contraste con el verde de la vegetación.
La Medina :
Piérdete por las calles laberínticas de la medina de Marrakech. Esta antigua ciudad está llena de tesoros escondidos, bulliciosos zocos, opulentos palacios y mezquitas históricas. Pasee por los zocos para descubrir artesanías locales como alfombras, cerámica, joyas, especias y ropa.
La Mezquita Koutoubia :
La Mezquita Koutoubia es uno de los monumentos más emblemáticos de Marrakech, con su impresionante minarete de 77 metros de altura. Construida en el siglo XII, esta mezquita es una obra maestra de la arquitectura almohade. Aunque el acceso al interior de la mezquita está restringido a los musulmanes, puedes admirar su magnífica fachada desde el exterior.
El Palacio de Bahía :
El Palacio de la Bahía, construido a finales del siglo XIX, es un magnífico ejemplo de la arquitectura tradicional marroquí. Este suntuoso palacio fue alguna vez el hogar del Gran Visir del Sultán, y sus numerosos salones, patios y jardines ofrecen una visión fascinante de la vida real en Marrakech en ese momento.
El desierto de Agafay :
A poca distancia de Marrakech se encuentra el Desierto de Agafay, una alternativa ideal para quienes no tienen tiempo de viajar al Sahara. Este desierto pedregoso ofrece espectaculares paisajes de dunas y llanuras áridas, perfectos para una escapada de un día o una noche bajo las estrellas. Puedes explorar el desierto en quad, buggy o incluso en camello para vivir una experiencia inolvidable.
¿QUÉ HACER EN MARRAKECH?
Compras en los zocos :
Explora los zocos de Marrakech para vivir una auténtica experiencia de compras. Encontrará una gran cantidad de productos locales, desde alfombras y cerámica hasta especias y ropa. ¡Recuerda negociar precios!
Tomar un té de menta en la plaza Jemaa el-Fna :
Siéntate en uno de los cafés de la plaza Jemaa el-Fna y disfruta de un té de menta mientras contemplas el bullicio de la plaza. Es el lugar ideal para observar la vida cotidiana de Marrakchia y empaparse del vibrante ambiente de la ciudad.
Tome una clase de cocina marroquí :
Aprenda a preparar platos tradicionales marroquíes durante una clase de cocina. Descubrirás los secretos de la cocina marroquí mientras preparas platos como tagine, cuscús y pastillas, y luego probarás los frutos de tu trabajo.
Haz un viaje al desierto:
Realice una excursión de un día o más al desierto para descubrir los espectaculares paisajes que rodean Marrakech. Ya sea que optes por un recorrido en quad, en buggy o en camello, te sorprenderá la belleza y la tranquilidad del desierto.
Visita las Tumbas Saadianas :
Explore las tumbas históricas que datan de la era saadí, con su magnífica arquitectura y elaboradas decoraciones. Estas tumbas son un testimonio de la riqueza y el refinamiento de la dinastía Saadí que gobernó Marrakech en el siglo XVI.
Da un paseo en carruaje :
Explora la ciudad desde la comodidad de un carruaje tirado por caballos. Es una forma agradable de descubrir los principales lugares turísticos de Marrakech, mientras disfrutas de un relajante paseo por las bulliciosas calles de la ciudad.(foto : vwalakte, freepik)