Entre las ciudades de Oslo y Trondheim se traza un camino de peregrinaje que cuenta con cerca de 700 kilómetros para rendirle honor a San Olav, el patrón del país nórdico.
Puede parecer un cuento de hadas, pero realizar este recorrido no es solo para apreciar y disfrutar de los bellos paisajes y las antiguas iglesias vikingas que se encuentran al interior del país, sin duda, es un viaje para interiorizar justo como lo es el camino xacobeo.
Los más de 700 kilómetros que tiene este camino separan la capital del país nórdico con la ciudad de Trondheim, cuna de San Olav, un rey vikingo quien llevó el cristianismo a esas tierras, tras su muerte en la batalla de Stiklestad fue canonizado y hoy es venerado como patrón de Noruega. Esta vía es considerada el camino de peregrinación de mayor importancia en el norte de Europa.
Los tramos de este recorrido disponen de una muy buena señalización, tanto en senderos como en bosques y los pueblos que se recorren, allí siempre está presente la cruz roja de San Olav, que se empalma con un símbolo de infinito y eternidad. Realizar el recorrido total puede durar más o menos cuatro semanas si diariamente se caminan 20 o 25 kilómetros, sin embargo también se cuenta con una opción más corta y es realizar el recorrido en coche y hacer paradas en los sitios más fundamentales.
Igual que en el Camino de Santiago, todos los peregrinos que realizan este recorrido sellan el pasaporte en las paradas de la ruta. Cuando se caminan más de 100 kilómetros también se recibirá la Carta de San Olav, diploma que hace acreditación oficial de la peregrinación.
La capital, Oslo, es el punto de partida y se dirige en dirección norte para realizar la primera parada a orillas del Mjøsa, el lago más grande de Noruega. Aquí se realiza una visita a su templo del siglo XII que es conocido como la catedral de cristal, en donde antiguos peregrinos realizaban una parada y en donde sus ruinas están conservadas bajo una estructura de metal y vidrio.
La siguiente parada se realiza en Gudbrandsdalen, en este lugar se encuentra la granja Dale- Gudbrandsdalen en que aparte de ser un albergue para los peregrinos, cuenta con una gran historia, uno de sus sucesos con mayor importancia cuenta que el rey Olav llegó a aquel lugar en 1021 para cristianizar a sus habitantes quienes para ese entonces solo creían en dioses nórdicos como Thor y Odín.
Andando una decena de kilómetros más, la atención se centra en la iglesia de Ringebu, la cual es uno de los 28 templos del medioevo construidos en madera noruega y es una de las más grandes, en el interior de esta iglesia se puede apreciar la imagen de San Lorenzo que data del XIII.
Uno de los puntos clave dentro de esta ruta se encuentra al apreciar las montañas de Dovre, en donde el antiguo camino que atravesaba este lugar, era utilizado por los monarcas noruegos para asistir a eventos como las coronaciones reales en Trondheim.
Antes de llegar a este paraje montañoso, en la llanura se debe realizar una visita a la iglesia medieval de Eysten, diferenciada a las demás dada su construcción en piedra que siempre está abierta para darle la bienvenida a los peregrinos.
El objetivo final de este itinerario es llegar a la catedral de Nidaros, una obra gótica-nórdica, es allí en el altar mayor en donde los peregrinos realizan las tradicionales tres vueltas al octógono que se encuentra en el lugar original de la antigua capilla y en donde se encuentran los restos de San Olav, y en donde a su vez se realizan oraciones mientras se tocan las columnas de este lugar sagrado.
No hay que irse de Trondheim sin antes realizar un paseo por su ciudad universitaria y visitar el palacio de madera más grande de toda la zona escandinava.
A pesar de que el camino finaliza en la gran fachada del templo, que está adornada con estatuas de diferentes personajes de la biblia, obispos y los reyes noruegos, hay quienes se animan a realizar los otros 90 kilómetros, caminando en dirección a Stiklestad, lugar en donde el rey Olav falleció durante una batalla, en esta ciudad actualmente se encuentran tres iglesias que llevan su nombre.
Actualmente se pueden encontrar vuelos a Oslo desde algunas ciudades de España desde los 35 € y aunque no existen compañías que ofrezcan realizar el camino de San Olav, toda la información necesaria se puede encontrar en su página web, allí se realiza la organización de los trayectos que se quiere recorrer y también se encuentran los albergues disponibles para pasar la noche en donde se coloca el sello oficial en el pasaporte.