Mumtaz Mahal fue la esposa número cuatro de Sha Jhan, quien fue el quinto emperador de la India; ella sin duda fue la esposa más querida por el gobernante. Prueba de ello es todo lo que hizo por ella una vez muerta.
Su boda fue celebrada en 1612 y juntos estuvieron por casi veinte años, a pesar de que el emperador tenía más esposas, Mahal fue la Primera Dama del palacio al ser la favorita.
Esta podría haber sido una historia de amor eterna, sin embargo, la mujer tuvo complicaciones en su decimocuarto parto y falleció por lo que su esposo se sumergió en una profunda tristeza. Cuenta la leyenda que luego del fatídico acontecimiento el gobernante prometió dos cosas: mantenerse fiel a su viudez y construir la tumba más bella para el eterno descanso de su amada.
Este fue el inicio de lo que hoy conocemos como el Taj Mahal, uno de los monumentos más famosos y una de las siete maravillas del mundo. El edificio blanco con sus cúpulas redondas que se refleja en el agua de los estanques es la imagen más emblemática, sin embargo la extensión del lugar es mucho más amplia. En el edificio principal se encuentra el mausoleo, donde yacen los restos de su esposa, este lugar está rodeado de cuidados minuciosos y jardines armónicos, anteceden al resto de edificaciones que acompañan el lugar.
Las proporciones exactas son las características principales del monumento, que generan una armonía única a la vista. El río Yamuna atraviesa el lugar de forma vertical y es un punto de referencia para proyectar la simetría del plano. Hasta el más mínimo detalle ha sido cuidado en cuanto a la decoración del lugar. Y la excelente caligrafía invita a leer algunos versos del Corán que allí se encuentran.
Se dice que cerca de 22.000 hombres hicieron parte de la construcción de este magnífico lugar, que seguía de cerca la arquitectura palaciega mogol, con rastros de elementos islámicos, persas e indios. Tan maravilloso fue el resultado, que cuenta la historia que el gobernador cortaba las manos de los trabajadores para que nunca pudieran construir nada similar o de igual belleza como la obra que habían levantado.
La construcción del Taj Mahal finalizó en 1656 dejando a Agra posicionada en el mapa de las ciudades que albergan maravillas de la arquitectura mundial.
Tiempo después el gobernante enfermo y su hijo le arrebató el trono, Sha Jhan fue encerrado en la fortaleza Roja que se encontraba al otro lado del río y allí pasó sus últimos días, contemplando desde su ventana el lugar donde descansaba su esposa; lleno de melancolía y recordando siempre a su amada falleció un año después y sus restos descansan junto a los de su mujer.