Una gama de colores adorna el cauce del Río Caño Cristales, en un lugar lleno de naturaleza y belleza en el Parque Nacional Natural Sierra de la Macarena en el departamento del Meta en Colombia; tras años de conflicto armado en este lugar, la calma ha vuelto para su reapertura al turismo hace tan solo una década.
Para llegar a este lugar, es necesario llegar a Villavicencio, a tres horas de Bogotá, en esta ciudad se debe tomar un aeroplano que aterrizara en La Macarena, una vez allí se realizará un recorrido corto en una pequeña embarcación y finalmente se debe andar unas cuantas horas para llegar al destino.
Para el siglo pasado, miles de campesinos tomaron posesión de este lugar, luego de ser desplazados de sus tierras, lo que generó una disputa entre el gobierno colombiano, grupos paramilitares y carteles del narcotráfico, que se alargaría durante más de 20 años. Sin embargo y luego de estos sucesos, sus puertas abrieron de nuevo y es hoy uno de los destinos ecológicos más importantes de Colombia.
Este lugar por el que fluye Caño Cristales, es considerado único por su amplia biodiversidad y su alto número de especies vegetales y animales únicas como también por ser uno de los lugares con más cualidades geológicas del mundo. Esta sierra está situada a 150 kilómetros de Bogotá y se creó hace más de 1.200 millones de años.
Hace parte del escudo guayanés, una gran formación de rocas que se extiende por varios países de América Latina: Colombia, Brasil, Venezuela entre otros, lugares que han sido catalogados como una de las zonas más antiguas del planeta. Rica en diversidad de fauna y flora en esta extensa región que se conforma en un 25% de los bosques tropicales y 15 % del agua dulce del mundo.
Este lugar es conocido también como el río de los cinco colores y es que aunque la mayor parte del año sea solo una corriente normal de agua que cae por las rocas y saltos con más o menos fuerza, dependiendo de las temporadas climáticas, lo que hace que este caño diferente y único es que durante un poco más de tres meses su cauce muestra una paleta de colores inigualable.
En julio, las precipitaciones de lluvia disminuyen y el nivel del agua baja, es en ese momento en que las especies que habitan el interior tienen las condiciones óptimas para que la feromona acuática florezca y sea más vistosa, con una gran cantidad de hojas entre los tonos rojo y fucsia que se mecen bajo el agua. Entre septiembre y noviembre alcanza su máxima belleza mostrando un color más intenso debido a los pigmentos de organismos fotosintéticos que cumplen la función de proteger a las plantas de la oxidación y los rayos UVA y que son activados por el contacto solar con la planta cuando el cauce desciende. Para noviembre, el parque cierra, ya que las plantas del río están en periodo de reproducción.
Este lugar está catalogado como uno de los destinos que tienes que conocer antes de morir, y es que aunque tiene un cauce corto, de tan solo 100 kilómetros de longitud, está rodeado de saltos y cascadas que hacen que el lugar genera un gran impacto visual adicional a las tonalidades del agua
El gobierno colombiano ha trabajado incansablemente para promocionar Caño Cristales y La Sierra de La Macarena, creada en 1971, que se ha convertido en una de las rutas turísticas más importantes del país. Es un símbolo medioambiental donde se unen la Orinoquia, la Amazonia y el Bosque Andino, y sigue siendo una de las áreas de mayor interés ecológico más antiguas del continente.
La gran diversidad animal que allí se encuentra, va desde aves primitivas como el hoatzin, que anidan en árboles cerca al agua, hasta osos hormigueros, jaguares, pumas venados, variedad de especies de primates, reptiles y anfibios; sin embargo dentro del río no se encuentran peces, al no tener sedimentos no hallarán alimento allí.
Es un lugar que con el pasar de los años se ha convertido en un destino turístico al alza, buscando mostrar una cara diferente, a la de su pasado, del uso de las tierras; aún quedan vestigios de las pistas forestales que las FARC realizaron para el transporte de droga que a hoy se utilizan para que los turistas puedan llegar hasta el río que es todo un paraíso.