Tener un estilo de vida saludable implica disciplina, según profesionales, la buena alimentación es lo más importante, se debe reducir el consumo de productos que han sido sometidos a procesos químicos, con altos contenidos de azúcar o sodio, así como las comidas rápidas; ya que estos son los mayores causantes del aumento de peso.
Por esto quienes se encuentren en proceso de perder peso, necesitan aumentar el consumo de verduras, legumbres, frutas y proteínas saludables, pero la pérdida de peso no es lo único beneficioso de dejar el consumo de las comidas rápidas.
El funcionamiento óptimo del sistema digestivo está sujeto a una alimentación saludable y balanceada, ya que al presentar problemas de estreñimiento, los gases y la acidez, podrían ser provocados por un consumo alto de productos procesados. Y al tener un consumo regular de productos saludables, reducen de forma significativa estas molestias.
Para la disminución de la retención de líquidos, se deben disminuir los alimentos grasos, el alcohol y los fritos o comidas muy condimentadas, los cítricos, las gaseosas y reemplazarlos por frutas, verduras, legumbres y cereales.
Otro factor muy importante es el sueño el cual se ve interrumpido por el consumo de comidas rápidas, ya que la ingesta en altas cantidades de estos alimentos antes de dormir, incrementa los niveles de azúcar en la sangre, lo que interfiere en el descanso adecuado.
Las personas que mantienen un nivel de vida sana con una dieta balanceada, logran descansar de mejor forma y tienen un mayor rendimiento y energía durante el día.
Otros factores que afectan al tener una mala alimentación, son las migrañas y los dolores articulares, que se pueden disminuir al eliminar el consumo de las comidas procesadas.