Muere nuestro colaborador y amigo mas longevo. El 14 de octubre de 2024, el mundo del turismo perdió a una de sus figuras más influyentes y visionarias: Antonio-Pedro Tejera Reyes . Ha sido un colaborador incondicional, infatigable, constante y ejemplar en nuestro periódico a lo largo de los 30 años que lleva editándose.
Lo demuestra el hecho de que el día anterior, 13 de octubre, nos envió su último artículo, publicado el mismo día (ver https://www.elperiodicodelturismo.com/turismo/3271-turismo-indolencia-incapacidad-y-maldad-frente-a-honestidad-y-perseverancia )
Un pionero, una vida larga y completa
Antonio fue ante todo un incansable trabajador, un inquieto profesional. A la vista de su currículo, sorprende la cantidad de cosas que emprendió en disciplinas varias, aunque el turismo fue siempre el hilo conductor de su actuar. Viajero activo recorrió el mundo llevando a cada destino su impronta de experto turístico y dejando en el lugar su mensaje de valorización del sector. Llegó a los rincones más recónditos reuniéndose con personalidades, impartiendo una conferencia o dando una clase magistral. Su talento y su afabilidad le hacían un personaje cercano con talla de maestro.
A la luz de sus escritos, se ve pronto el talento natural que tenía para discernir problemas y soluciones en cualquier ámbito del turismo. Y, junto al fondo de la cuestión, disponía de una capacidad comunicativa que hacia fácil de asimilar lo que proponía. Tenía un radar especial para detectar las necesidades , elaborar dictámenes y proponer soluciones que borraran las carencias de cualquier actividad o actuación turística. Era fino observador que detectaba la incompetencia, aunque estuviera bajo el tapete de la mesa. Por eso también, libre de toda dependencia, su pluma la lanzaba como fusta contra todos aquellos que medraban con los cargos, pero que lastraban el sector turístico como una losa. No podía con la mediocridad. Aun así, su talante y disciplina lo impelían a no abandonar nunca su compostura de caballero.
Los últimos días de su vida, después de tanto rodar, los pasó en Perú, al lado de su insigne esposa, Elena. “Estoy ahora -decía- radicado en Perú , con la finalidad de apoyar, en todo lo que pueda, su desarrollo turístico, para lo cual la enseñanza es un pilar imprescindible y fundamental, como está más que demostrado.
Los principales fundamentos que han marcado mi vida en estos pasados años, en los cuales he tenido siempre presente que la divulgación de los valores del turismo, son la mejor forma de contribuir a la creación de un mundo en paz, para lo cual , lo más importante es precisamente aportar a esta causa una excelente y eficaz enseñanza. Una situación difícil, complicada… y según hemos comprobado, hasta llena de peligros…”
Un líder de renombre internacional
A lo largo de su carrera, Tejera Reyes trabajó en roles de liderazgo en diversas organizaciones nacionales e internacionales. Fue el fundador de los estudios turísticos en Canarias, como director titular de las Escuelas de Turismo de Tenerife y Las Palmas de Gran Canaria, en 1965.
Presidente y director general del Instituto Superior de Estudios Turísticos Internacionales Tejera Reyes & Asociados, desde su fundación, en Canarias y Venezuela, en el año 1971, y presidente de Didáctica Turística, S.L. (Escuela Superior de Turismo de Las Palmas de Gran Canaria), fundada en 1965, además de Miembro del Grupo de Expertos de la Organización Mundial del Turismo,
Cónsul Honorario de Nicaragua en Canarias (provincia de Santa Cruz de Tenerife) y secretario para España de la Confederación Panamericana de Escuelas de Hotelería, Gastronomía y Turismo (CONPHET).
También ha sido vicepresidente del Consejo de Educación de la Organización Mundial del Turismo (OMT), desde junio de 2001 a octubre 2003, y presidente del Capítulo de Canarias, de la Confederación de Organizaciones Turísticas de América Latina (COTAL), desde mayo de 2001 a enero 2004.
Ha organizado y dirigido cursos y seminarios académicos de turismo, con carácter internacional, en España, Venezuela, Colombia, Paraguay y Brasil, desde 1970.
Es autor y creador del programa de estudios superiores de turismo máster en calidad turística ambiental sostenible y promoción de la paz, en colaboración con la Universidad para la Paz (UPAZ), de Naciones Unidas (ONU), que se imparte en la actualidad en Canarias.
También es autor y creador del programa de postgrado "La Calidad en los Servicios y Gerencia Turístico-hotelera", especialmente dedicado a alumnos americanos, que se imparte en Canarias en colaboración con empresas hoteleras y entidades públicas.
Ha sido -entre otros cargos nacionales- y presidente de la Asociación Española de Escuelas de Turismo;
vicepresidente en la UIOOT (Unión Internacional de Organismos Oficiales de Turismo) -hoy, Organización Mundial del Turismo- donde realizó diversas misiones, estudios e informes turísticos, en países de América como Brasil, Venezuela, Chile, Argentina, México, Colombia, Perú, El Salvador, etc.
Diplomado en diversas especialidades y estudios sobre el turismo, por el organismo oficial español Instituto de Estudios Turísticos (Madrid), y Diploma de Honor en Estudios Superiores de Turismo, otorgado
Tejera Reyes no solo se destacó en el ámbito académico, sino que también fue un firme defensor de la profesionalización del sector y la creación de políticas públicas que impulsaran el desarrollo turístico sostenible. Su visión de un turismo responsable y de calidad lo llevó a participar activamente en la Fundación de Ecoturismo de Latinoamérica (FUNECO) ,
Innovación constante en la profesión
Antonio fue un verdadero visionario en el campo de la educación turística. A lo largo de su carrera, impulsó programas educativos innovadores que unían la formación técnica con la ética profesional. Entre sus logros más destacados se encuentra la creación de programas de máster en calidad turística, universidad para la Paz de las Naciones Unidas, turismo ambiental sostenible y promoción de la paz.
Además, promovió el postgrado en calidad de servicios y gerencia turística-hotelera ,
A lo largo de su vida, Tejera Reyes también mostró un compromiso decidido con los valores humanos y sociales. Consideraba que el turismo podía ser una herramienta de paz y entendimiento entre pueblos. Su trabajo no solo se limitó a la educación o al desarrollo económico, sino que también estuvo marcado por su búsqueda de la dignificación del turismo como una ocupación de privilegio.
Su vertiente de escritor y periodista
Tejera desplegó una gran labor de difusión y literatura en muchos Medios y foros de medio mundo. Fue miembro activo del Salón Internacional de los Héroes del Turismo, Conseiller International, Associazione Intenazionale Stampa Turística AIST. (Italia), Diplome D´Honneur de la Unión des Escrivans et Journalistes Hellenes du Tourisme, FIJET Federación Mundial de Periodistas y Escritores de Turismo. Inscrito en el Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación. Perú. Miembro del Consejo Consultivo de la Fundación de Ecoturismo de Latinoamérica, FUNECO. Pluma de Oro de Rotary Internacional. Puerto de la Cruz. Tenerife. Islas Canarias… y casi medio millar de artículos publicados en www.elperiodicodelturismo.com .
Educación de calidad
En una de sus últimas reflexiones, Tejera Reyes subrayó la necesidad urgente de un modelo de formación turística que combine conocimiento, técnica y una profunda responsabilidad social. Su discurso mas reiterado era trabajar por un turismo que trascienda fronteras y que se convierta en herramienta de paz, desarrollo y entendimiento global .
En sus últimas palabras, Tejera Reyes compartió, a modo de epitafio, un mensaje de esperanza y libertad: “Cuando piensen en mí, sonrían porque ahora soy un alma libre y en paz”. Hoy, al recordarlo, es imposible no sonreír también. Su legado no solo perdura en los pasillos de las escuelas, facultades o paraninfos , está inserto en la conformación de profesionales que han bebido de sus ideas y hoy las ponen en práctica. Ese legado es inmortal en el turismo de Canarias y el mundo
Estamos viviendo - decía en uno de sus artículos- tiempos difíciles, inmersos en una vorágine de corrupción que parece no tener fin. El entorno en el que nos desenvolvemos se ha visto corrompido por la avaricia y el amiguismo, donde los méritos y la experiencia profesional ya no valen de nada frente a la familiaridad y el “tarjetazo”. Cualquiera que tenga la mejor preparación profesional del mundo para un puesto de trabajo puede ver cómo esa oportunidad le es negada a favor de alguien que, simplemente, tiene los “contactos” adecuados. La profesionalidad, el conocimiento y la preparación se ven opacados por un sistema que prioriza las relaciones personales y las redes de poder, dejando de lado el mérito y la ética. Este panorama no solo es desalentador, sino tremendamente nocivo para una actividad que es de servicio.
Es precisamente en este contexto de desilusión y frustración que se hace más relevante que nunca el ejemplo de Antonio-Pedro Tejera Reyes, quien dedicó toda su energía a predicar la decencia, la calidad, la responsabilidad y el buen hacer en esta profesión que es vocacional.
En los años que vivió en Perú, siempre tuvo presente que el turismo debe ser uno de los ejes de su desarrollo económico y social.
A pesar de los grandes avances que logró en su campo, Tejera Reyes nunca dejó de luchar contra las injusticias estructurales, los cargos políticos que están en el sector por recompensa y no por méritos o títulos académicos vacíos incapaces de propiciar el desarrollo turístico y desterrar el desempleo.
Hoy, ante el panorama global desolador que enfrentan millones de personas desempleadas, Tejera Reyes se mantenía firme en su convicción de que el turismo y la educación turística son la mejor herramienta para obtener una gestión responsable y conseguir que las políticas públicas coadyuven con la iniciativa privada a alcanzar la eficiencia.
Reflexión
A pesar de los avances conseguidos en los últimos años, el legado de Tejera Reyes también debe ser una llamada de atención sobre los grandes desafíos que enfrenta el sector turístico. En sus últimos escritos, Tejera Reyes expresó su preocupación por la situación actual del turismo, marcada por la falta de preparación en muchos de los países en vías de desarrollo, y por un modelo turístico que sigue sin integrar de manera efectiva el conocimiento, la técnica y la cultura persiguiendo un negocio a corto plazo, sin una visión estratégica.
A pesar de las dificultades, Tejera Reyes nunca perdió la esperanza. Su vida fue un ejemplo de resistencia, de lucha por la educación y por un turismo ético, considerando el turismo como una herramienta poderosa para la construcción de la paz y el entendimiento "El conocimiento mutuo y la amistad como ocasión de servir”. Como Rotary Internacional , no perdió la ocasión de difundir sus principios y practicarlos como el mejor ejemplo de demostrar la teoría y la práctica.
Gracias, Antonio, misión cumplida en este trayecto de casi 90 años y ahora tienes el universo para ampliar tus sueños. Descansa en paz, amigo