La planificación  del  turismo requiere considerar una  serie  de fenómenos que  vayan mas allá  incluso de los  enfoques  urbanísticos   y económicos

En sus inicios, la Planificación del turismo trató de dar respuesta a problemas muy concretos relacionados con el ordenamiento del territorio para fines turísticos, o con la solución de dificultades de índole económicos que afrontaban países, por lo que su alcance fue muy limitado y no consideró en su total magnitud todos aquellos factores que intervienen o tienen relación con la actividad turística. Como consecuencia de este alcance limitado que tuvo la Planificación del Turismo, su desarrollo comenzó a mostrar efectos negativos que, en un principio le fueron imputados al propio turismo, cuando en realidad no eran más que el resultado de un proceso de Planificación incompleto. En este artículo externamos algunos comentarios al respecto.

ANTECEDENTES DE LA PLANIFICACIÓN DEL TURISMO

Los antecedentes que se dispone respecto a la Planificación del Turismo en la Gestión Pública, indican que esta actividad empezó con la elaboración del Primer Plan Quinquenal del Equipamiento Turístico Francés para el período 1948-1952. No se trata de una casualidad, puesto que fue precisamente en Francia donde comienza, en 1946, la Planificación Central en países de economía de mercado, con la redacción del primer plan conocido como Plan Monnet.

Otro país pionero en la Planificación del Turismo a nivel nacional es sin dudas España, que ya 1952, a solo un año de haberse creado el Ministerio de Información y Turismo, llevó a cabo experiencias en ese sentido y elaboró el Anteproyecto del Plan Nacional de Turismo.

Por supuesto que a partir de entonces los países comenzaron a Planificar las actividades en este sector, pero preferimos centrarnos en los distintos enfoques con que se encaró el desarrollo del sector, y en tal sentido diremos que desde sus inicios la Planificación del Turismo ha obedecido a distintas orientaciones, respondiendo ya sea a requerimientos de orden físico o a consideraciones de índole económica, pero siempre manteniendo un enfoque parcial de la actividad. Como se podrá observar en los comentarios que efectuamos a continuación.

La primera orientación que tuvo la Planificación del Turismo fue el que hoy se conoce como Enfoque urbanístico. El cual tiene su explicación, en primer lugar por el hecho que tradicionalmente el turismo había sido encarado a nivel local, y segundo, por la imperiosa necesidad de ordenar el territorio turístico a fin de adaptarse a la presión de un creciente turismo masivo, impulsado fuertemente por los grandes organizados de viajes.

Enfoque que requería la realización de un análisis, generalmente de orden físico del territorio, y culminaba en un detallado plan de desarrollo físico denominado Plan maestro, relacionado con el ordenamiento y uso del suelo para la localización de las facilidades y el equipamiento para fines turísticos.

Razón por la cual los planes diseñados con este enfoque se caracterizaron por la realización de grandes esfuerzos para la elaboración del denominado Inventario turístico, efectuado desde luego con un criterio físico, ya que en la mayoría de los casos estaba a cargo de un arquitecto, y no se profundizaba en otros campos, entre ellos el social y el económico.

Por ello como consecuencia del Seminario sobre Desarrollo del Turismo, celebrado en Berna, Suiza, en 1968, se impulsó un nuevo enfoque en la Planificación del Turismo, y las Agencias Internacionales de Desarrollo, en especial el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, establecieron líneas de crédito destinadas al fomento del turismo, y la Planificación del Turismo pasó a tener un nuevo enfoque, conocido como el Enfoque económico.

El citado Enfoque económico recurre en realidad al empleo de metodologías y técnicas ya experimentadas en otros campos de la actividad económica, adaptándolas al caso particular del turismo. Pero al igual que el Enfoque urbanístico, el Enfoque económico es también un enfoque parcial con el cual se emprendió la Planificación del Turismo, aunque es evidente que el análisis del mercado es significativamente más detallado, pero no considera en su análisis la competencia de otros destinos, ni los aspectos relacionados con la distribución en la Industria Turística, dentro y fuera del país considerado.

Al analizar en profundidad este nuevo enfoque se podía observar que el mismo, al igual que el Enfoque urbanístico, encaraba la Planificación del Turismo en realidad en el corto plazo con carácter operativo, y no consideraba los objetivos a largo plazo planteados en los Planes Nacionales de Desarrollo. Por lo que sus objetivos no eran congruentes con los objetivos estratégicos hacia los cuales apuntaban los referidos Planes de Desarrollo.

Otro aspecto a observar en este enfoque, es que no se consideraba en la Planificación del Turismo el principal cometido que le marca la Ley Nacional de Turismo al Organismo Rector del Sector, que es la formulación de la “Política Turística” , la cual debía traducirse en Planes y Programas de Desarrollo. Y por consiguiente, tampoco se mencionaba el carácter estratégico del Desarrollo del Turismo en el contexto de los Planes Nacionales de Desarrollo de los países. Lo cual impedía definir las características del proceso de Planificación a encarar.

Ante las deficiencias observadas decidimos establecer una metodología que permitiera planificar la actividad turística en el contexto de los Planes Nacionales de Desarrollo a los cuales pertenece, lo cual dio origen al nuevo enfoque en la Planificación del Turismo denominado Enfoque Estratégico, presentado en la obra

Administración del Turismo; Planificación y Dirección, Vol. 2, publicada en Editorial Trillas, México, en 1985. El esquema metodológico de dicho enfoque fue incluido también en la Revista Estudios Turísticos No. 85, Primavera 1985, del Instituto de Estudios Turísticos de Madrid, de la Secretaria General de Turismo de España, y se proyectó a nivel internacional.

COMENTARIO FINAL

Para finalizar, diremos que no podíamos desaprovechar la oportunidad para hacer unos comentarios relacionados con las investigaciones realizadas en 1985 para verificar si la OMT, en su publicación “Conocer el Turismo; Glosario de términos”, contemplaba las definiciones de Política Turística y la Planificación de Turismo, y comprobamos que dichos términos no figuraban en dicho Glosario, a pesar de que la formulación de la Política Turística es el primero y principal cometido que le asigna la Ley Nacional de Turismo a los Organismos de Turismo de los países, por cuanto la misma debe traducirse en Planes y Programas de acción para el Desarrollo del Turismo.

Comprobamos así mismo que no había una definición aceptada al respecto, y nos vimos obligados a definir la Política Turística para poder fundamentar el proceso de Planificación Estratégica del Turismo que era nuestro propósito, y lo hicimos de la siguiente manera: “El conjunto de decisiones en materia turística que, integradas armónicamente en el contexto de la Política Nacional de Desarrollo, orientan la conducción del sector y norman las acciones por seguir, las cuales se traducen en Planes y Programas de Desarrollo Sectorial”. Definición ampliamente divulgada a nivel internacional, como se mencionara, a partir de la publicación en la Revista Estudios Turísticos de la Secretaría General de Turismo de España en 1985, de la metodología presentada para la Planificación Estratégica del Turismo.

Pasaron muchos años de ello, hasta que nos enteramos que entre los años 2005 y 2007 la OMT había hecho un gran esfuerzo para rever los Conceptos, Definiciones y Clasificación de términos en su Glosario de Términos. Por lo que entramos al sitio web de la Organización y comprobamos que no figuraban en el nuevo Glosario la conceptualización de la Ley de Turismo, que constituye el marco jurídico del Desarrollo del Turismo, ni la Política Turística que es el primero y más importante de los cometidos que dicha Ley le asigna a los Organismos de Turismo, y otros aspectos que deberían haber sido incluidos en el mismo.

Lo cual nos confirmó que la OMT no ha comprendido todavía que el turismo ha sido incorporado a la Administración Pública para coadyuvar al Progreso y el bienestar de la población, y no para la realización de las Estadísticas de Turismo, como los hechos lo atestiguan. Lo que explica el por qué muchos critican que la Organización no está cumpliendo con sus cometidos. Adjunto, una prueba de ello.

Escribir un comentario