Si hay un lugar en Barcelona donde los amantes del gin tonic encuentran su hogar, ese es sin duda la coctelería de Pau.
Con más de 30 años de experiencia en el mundo de la coctelería, Pau no solo es un experto en la mezcla de sabores, sino que también es un verdadero embajador de la cultura del gin tonic. Con más de 500.000 gin tonics preparados a lo largo de su carrera, su profesionalidad y dedicación son inigualables.
La coctelería de Pau se ha convertido en un referente en la ciudad, no solo por la calidad de sus bebidas, sino también por la calidez y simpatía que Pau ofrece a cada uno de sus clientes. Desde el momento en que cruzas la puerta, te sientes como en casa. Pau tiene un don especial para hacer que cada visitante se sienta bienvenido, creando un ambiente amigable y relajado que invita a disfrutar de una experiencia única.
Uno de los aspectos más destacados de este establecimiento es su impresionante selección de ginebras. Con más de 1300 variedades diferentes, Pau ha dedicado su vida a investigar y seleccionar las mejores ginebras del mercado. Cada botella cuenta una historia, y Pau está siempre dispuesto a compartir su conocimiento, recomendando la ginebra perfecta para cada paladar. Además, complementa cada gin tonic con tónicas de alta calidad, asegurando que cada sorbo sea una explosión de sabor.
La importancia de la coctelería de Pau va más allá de la bebida. Es un lugar donde se celebra la cultura del gin tonic, donde se organizan catas y eventos que educan a los clientes sobre las diferentes variedades de ginebra y las mejores combinaciones. “Son los padres –dice él- los que traen a sus hijos a mi establecimiento para conozcan los mejores preparados” Pau no solo sirve bebidas; crea experiencias memorables que unen a las personas.
Pau arrancó su negocio en los aledaños de Barcelona, Molins de Rei. Allí logró convencer al personal que la coctelería, y el gin tonic en particular tienen mucho recorrido y pronto consiguió convertir los infieles en fieles que ahorra arrastra incluso a su bar de Barcelona que ha convertido en santa sanctórum del gin tonic. No es solo un bartender que mezcla bebidas, es un profesional apasionado cuyo conocimiento sobre ginebras y tónicas es extenso, lo que le permite ofrecer combinaciones únicas que satisfacen incluso a los paladares más exigentes. Es un tío simpático, frontal, llano y nada creído. Está tan seguro de sí que se atreve a dar garantía del coctel que elijas. durante los 15 primeros minutos. Si no te gusta: te lo cambia por otro.
Celebración de amigos con motivo del doctorado de Juan Nadales, director de Gan Vía Radio
El establecimiento es la Capilla Sixtina de la ginebra, la mejor decoración en la retaguardia del mostrador: todas las botellas a la vista y listas para que se conviertan en milagro depositado en la copa una vez que las manos de Pau le den la bendición. Es un establecimiento acogedor en luz y detalles e imán de encuentro entre amigos, parejas o celebraciones tanto en las mesas de cuatro como en la mesa altar que franquea la entrada a mayor altura, franqueada de taburetes donde puedes apoyar los codos y descargar las tensiones del día.
Pau está llamado a ir a más; tanto talento no puede restringirse a un solo local y la suerte le tentará para explosionar con nuevos satélites en las ciudades más emblemáticas. Madrid está brillando ya en el horizonte. Tampoco está solo, tiene un tándem, su pareja, que destila la misma esencia y eso hace que el local fluya como los tempos de una sinfonía.
En un mundo donde la coctelería a menudo se ve afectada por la prisa y la falta de atención al detalle, Pau se destaca como un faro de profesionalidad y pasión. Su dedicación a la perfección y su amor por el gin tonic son evidentes en cada bebida que prepara. Si estás en Barcelona y buscas disfrutar de un gin tonic excepcional, no puedes dejar de visitar la coctelería de Pau. Aquí, cada trago es una celebración de la tradición y la innovación, todo servido con una sonrisa. ¡Salud!